lunes, 28 de julio de 2008

lunes, 9 de junio de 2008

Conversación.

Fer: Che.. para vos, yo tengo determinación?
Pablo: Nu.
Fer: Ah.

(silencio)

Pablo: Por?
Fer: Mh.. No sé.
Pablo: Ah, bueno.



en fin!

lunes, 2 de junio de 2008

LAS COSAS Q ODIO :)

bueno, como hoy durante la mañana estaba ensimismada pensando en lo mucho que odio al colegio, y las materias, y las profesoras, y el uniforme, y todo lo q lo compone, decidí que, ya q tengo esa tendencia anarquica de odiar todo lo q me rodea, hacer una lista d estas cosas para poner a prueba mi aceptación por nose..el universo (?) asi q voy a empezar por lo obvio, jajaj:

odio el colegio
odio química
odio matemática
odio física
odio educación física ¬¬
odio a la gorda de gimnasia que te controla cada vez q estas haciendo algo, practicamente te corrije hasta la forma que te tirás un pedo
odio el mal aliento de los profesores (solo para entendidos)
odio las preguntas pelotudas cómo: ¿estás escuchando?, ¿estás prestando atención? : NOOO, ES OBVIO Q NO ESTOY ESCUCHANDOOO, ES EVIDENTEEE
odio las amenazas pelotudas de vani fari de que nos va a pedir la libreta
odio reunirme para hacer trabajos
odio que las profesoras tengan raices hasta la mitad del pelo (por dios, es irritante! NO SE DAN CUENTA CUANDO SE VEN AL ESPEJO TODOS LOS DIASS DE QUE YA ES HORA DE TEÑIRSEE!?)
odio gastar plata en fotocopias pelotudas de materias pelotudas q dicen una sarta impresionante e inútil de pelotudeces que nunca me van a servir
odio q los profesores me carraspeen al lado del banco como diciendo "deja de dibujar"..si me interesara la materia no estaria dibujando :C!
odio encontrar pelos de origen dudoso en los pebetes
odio esas normas pelotudas sobre las zapatillas y los benditos colores, tanto le puede cambiar la vida a una persona si los cordones son blancos o negros?
odio esas charlas pelotudas religiosas donde te pasan videos de clowns, o vienen minas exclamando con orgullo "ESTOY DE NOVIA CON DIOS"..a quien le importa? :S
odio q todos los comunicados donde te dicen q t van a aumentar la cuota empiecen con "paz y bien" ¬¬
odio que te pregunten 200 mil veces por dia, en todas las materias masomenos: "¿qué vas a seguir?" venimos hablandolo desde que empezó el año, TODAVIA NO LO SABEN?! ¬¬
odio que te persigan y te hostiguen todos los dias con el color de la bufanda ¬¬ no me voy a comprar una bufanda roja! entiendanlo!!
odio cuando hay algún pelotudo q no entiende una palabra obvia en una oración. ejemplo: ¿qué es percepción? ¿que es inanición? ¬¬ COMPRENSE UN DICCIONARIO!
odio las faltas de ortografía
odio q me interrumpan cuando estoy hablando
odio q se me rompa la mina del lápiz
odio q se me acabe la mina del lápiz
odio no tener más minas de lápiz para reponer la q se acabó :C
odio escuchar esas conversaciones pelotudas de todas las semanas, q empiezan el lunes y no terminan nunca, sobre lo q se va a poner la gente el viernes.. ¬¬ discutanlo consigo mismas, no lo conviertan en un debate multitudinario!
odio hacer cartulinas
odio las discusiones sobre el contrato con sunset
odio casi ángeles (y todas sus coreografias y canciones, que tengo que ver representadas todas las mañanas por sus millones de fans que acuden al colegio :C)
odio high school musical (sí chicas, es hora de aceptarlo: ES PARA NIÑOS, NO PARA ADOLESCENTES)
odio a zac efron (DENSE CUENTAAA, SE LA MORFAAA!!!)
odio a los jonas brothers (esos niños no deben tener ni pelos en las axilas)
odio a los gordos raros que nos visitan tooodos los ebnditos dias de nuestras vidas al curso
odio el hedor apestoso de elías
odio sus comparaciones del complejo activado con dragon ball (QUE TIENEN QUE VERR?!)
odio querer hablar de una persona supuestamente "conocida" y q nadie sepa de que hablo (ejemplo, marx)
odio que me pregunten que dibujo cuando todavía no terminé de dibujarlo
odio la música pop
odio el folclore
odio la cumbia
odio el rock nacional
odio rafaga ¬¬
odio a gilda ¬¬
odio la electrónica
odio a los floggers
odio a la gente q baila electro (como si estuviesen convulsionando) por la calle ¬¬
odio esa tendencia de losflacos a creer q vestirse de rosa está bien: SON HOMBRES, UN POCO DE MASCULINIDAD POR FAVOR
odio a los metrosexuales
odio a los chetos
odio que los chabones usen jopo
odio el flequillo prominente que tapa absolutamente toda la cara de los chabones
odio q los chabones se planchen el pelo
odio a los emos (sin embargo, no les pegaría u_u)
odio a LAS chetas
odio las extensiones
odio AY not dead
odio las remeras de más de $60
odio la ropa rosa
odio el amarillo
odio el celeste
odio los colores pasteles :S
odio la tarta de atún
odio la arta de verdura
odio la espinaca
odio los espárragos (espaaarragos, espaaarragos, se comen en la ceeenaa - asumo q todos vieron ese capítulo de alf :C-)
odio la lechuga (es insipida, pero la acepto si está acompañada de más cosas)
odio la zanahoria
odio la sopa
odio el té
odio el pollo :C POR DIOS, LO DETESTO!
odio la cebolla un poco más que al pollo
odio el dulce de leche (NO SOY ANORMAL, DEJEN DE DECIRMELO)
odio la coca (idem al dulce de leche)
odio la pepsi
odio el fernet (sabe a jarabe)
odio el whisky
odio la morsilla
odio las peras y las uvas (2x1! :D)
odio las manzanas verdes (notese q puse verdes, no rojas, si alguna vez me regalan una manzana roja bienvenida sea, aunque prefiero q me regalen chocolate)
odio las alergias
odio los granitos
odio las cremas para los granitos que te dejan la cara empastelada y hedionda
odio q la gente no se explote los granitos y uno c9orra el riesgo de que la punta blanca te salte en la cara (:C!!!) cuando le hablas a dicha persona ¬¬
odio el vocabulario villero
odio el vocabulario cheto
odio a los rolingas
odio a los rolling stone
odio las canciones de amor
odio la represión de este colegio-país-mundo de mierda ¬¬
odio las pelotudeces que dice la iglesia sobre el sexo y la ciencia
odio la neurosis de mi vieja ¬¬
odio a los pae (la secta, no los pasteles :))
odio a los hippies y sus creencias insulsas
odio cuando la gente me dice q les provoco miedo
odio las pretensiones pelotudas de gente hueca de llegar a ser nose, neurocirujanos xD o presidentes (?)
odio los bichos
odio las mariposas (para mi son una aberración de la naruraleza, no se las puede llamar simplemente "bichos")
odio a los pendejos de 4to año
odio que mi hermana venga a mi pieza a instalarse cuando no estoy
odio q mi vieja abuse de mi poco conocimiento sobre computadoras
odio q me digan que soy rara, bah, que me lo recuierden todos los días en realidad (aunque en parte me enorgullece no ser normal..la gente normal me asusta :C)
odio la gente monotemática





bueno me cansé ya de odiar tantas cosas, por ahora son éstas, si se me ocurren más haré otra lista después. Sean felices! :) jajajaj

domingo, 25 de mayo de 2008

lunes, 19 de mayo de 2008

El cuervo, Edgar Allan Poe

Una vez, al filo de una lúgubre media noche,
mientras débil y cansado, en tristes reflexiones embebido,
inclinado sobre un viejo y raro libro de olvidada ciencia,
cabeceando, casi dormido,
oyóse de súbito un leve golpe,
como si suavemente tocaran,
tocaran a la puerta de mi cuarto.
“Es —dije musitando— un visitante
tocando quedo a la puerta de mi cuarto.
Eso es todo, y nada más.”

¡Ah! aquel lúcido recuerdo
de un gélido diciembre;
espectros de brasas moribundas
reflejadas en el suelo;
angustia del deseo del nuevo día;
en vano encareciendo a mis libros
dieran tregua a mi dolor.
Dolor por la pérdida de Leonora, la única,
virgen radiante, Leonora por los ángeles llamada.
Aquí ya sin nombre, para siempre.

Y el crujir triste, vago, escalofriante
de la seda de las cortinas rojas
llenábame de fantásticos terrores
jamás antes sentidos. Y ahora aquí, en pie,
acallando el latido de mi corazón,
vuelvo a repetir:
“Es un visitante a la puerta de mi cuarto
queriendo entrar. Algún visitante
que a deshora a mi cuarto quiere entrar.
Eso es todo, y nada más.”

Ahora, mi ánimo cobraba bríos,
y ya sin titubeos:
“Señor —dije— o señora, en verdad vuestro perdón
imploro,
más el caso es que, adormilado
cuando vinisteis a tocar quedamente,
tan quedo vinisteis a llamar,
a llamar a la puerta de mi cuarto,
que apenas pude creer que os oía. ”
Y entonces abrí de par en par la puerta:
Oscuridad, y nada más.

Escrutando hondo en aquella negrura
permanecí largo rato, atónito, temeroso,
dudando, soñando sueños que ningún mortal
se haya atrevido jamás a soñar.
Mas en el silencio insondable la quietud callaba,
y la única palabra ahí proferidaera el balbuceo de un nombre: “¿Leonora?”
Lo pronuncié en un susurro, y el ecolo devolvió en un murmullo: “¡Leonora!”
Apenas esto fue, y nada más.

Vuelto a mi cuarto, mi alma toda,
toda mi alma abrasándose dentro de mí,
no tardé en oír de nuevo tocar con mayor fuerza.
“Ciertamente —me dije—, ciertamente
algo sucede en la reja de mi ventana.
Dejad, pues, que vea lo que sucede allí,
y así penetrar pueda en el misterio.
Dejad que a mi corazón llegue un momento el silencio,
y así penetrar pueda en el misterio.”
¡Es el viento, y nada más!

De un golpe abrí la puerta,
y con suave batir de alas, entró
un majestuoso cuervo
de los santos días idos.
Sin asomos de reverencia,
ni un instante quedo;
y con aires de gran señor o de gran dama
fue a posarse en el busto de Palas,
sobre el dintel de mi puerta.
Posado, inmóvil, y nada más.

Entonces, este pájaro de ébano
cambió mis tristes fantasías en una sonrisa
con el grave y severo decoro
del aspecto de que se revestía.
“Aun con tu cresta cercenada y mocha —le dije—,
no serás un cobarde,
hórrido cuervo vetusto y amenazador.
Evadido de la ribera nocturna.¡
Dime cuál es tu nombre en la ribera de la Noche Plutónica!”
Y el Cuervo dijo: “Nunca más.”

Cuánto me asombró que pájaro tan desgarbado
pudiera hablar tan claramente;
aunque poco significaba su respuesta.
Poco pertinente era. Pues no podemos
sino concordar en que ningún ser humano
ha sido antes bendecido con la visión de un pájaro
posado sobre el dintel de su puerta,
pájaro o bestia, posado en el busto esculpido
de Palas en el dintel de su puerta
con semejante nombre: “Nunca más.”

Mas el Cuervo, posado solitario en el sereno busto.
las palabras pronunció, como virtiendo
su alma sólo en esas palabras.
Nada más dijo entonces;
no movió ni una pluma.
Y entonces yo me dije, apenas murmurando:
“Otros amigos se han ido antes;
mañana él también me dejará,
como me abandonaron mis esperanzas.”
Y entonces dijo el pájaro: “Nunca más.”

Sobrecogido al romper el silencio
tan idóneas palabras,
“sin duda —pensé—, sin duda lo que dice
es todo lo que sabe, su solo repertorio, aprendido
de un amo infortunado a quien desastre impío
persiguió, acosó sin dar tregua
hasta que su cantinela sólo tuvo un sentido,
hasta que las endechas de su esperanza
llevaron sólo esa carga melancólicade ‘Nunca, nunca más’.”

Mas el Cuervo arrancó todavía
de mis tristes fantasías una sonrisa;
acerqué un mullido asiento
frente al pájaro, el busto y la puerta;
y entonces, hundiéndome en el terciopelo,
empecé a enlazar una fantasía con otra,
pensando en lo que este ominoso pájaro de antaño,
lo que este torvo, desgarbado, hórrido,
flaco y ominoso pájaro de antaño
quería decir granzando: “Nunca más.”

En esto cavilaba, sentado, sin pronunciar palabra,
frente al ave cuyos ojos, como-tizones encendidos,
quemaban hasta el fondo de mi pecho.
Esto y más, sentado, adivinaba,
con la cabeza reclinada
en el aterciopelado forro del cojín
acariciado por la luz de la lámpara;
en el forro de terciopelo violeta
acariciado por la luz de la lámpara
¡que ella no oprimiría, ¡ay!, nunca más!

Entonces me pareció que el aire
se tornaba más denso, perfumado
por invisible incensario mecido por serafines
cuyas pisadas tintineaban en el piso alfombrado.
“¡Miserable —dije—, tu Dios te ha concedido,
por estos ángeles te ha otorgado una tregua,
tregua de nepente de tus recuerdos de Leonora!
¡Apura, oh, apura este dulce nepente
y olvida a tu ausente Leonora!”
Y el Cuervo dijo: “Nunca más.”

“¡Profeta!” —exclamé—, ¡cosa diabolica!
¡Profeta, sí, seas pájaro o demonio
enviado por el Tentador, o arrojado
por la tempestad a este refugio desolado e impávido,
a esta desértica tierra encantada,
a este hogar hechizado por el horror!
Profeta, dime, en verdad te lo imploro,
¿hay, dime, hay bálsamo en Galaad?
¡Dime, dime, te imploro!”
Y el cuervo dijo: “Nunca más.”

“¡Profeta! —exclamé—, ¡cosa diabólica!
¡Profeta, sí, seas pájaro o demonio!
¡Por ese cielo que se curva sobre nuestras cabezas,
ese Dios que adoramos tú y yo,
dile a esta alma abrumada de penas si en el remoto Edén
tendrá en sus brazos a una santa doncella
llamada por los ángeles Leonora,
tendrá en sus brazos a una rara y radiante virgen
llamada por los ángeles Leonora!”
Y el cuervo dijo: “Nunca más.”

“¡Sea esa palabra nuestra señal de partida
pájaro o espíritu maligno! —le grité presuntuoso.
¡Vuelve a la tempestad, a la ribera de la Noche Plutónica.
No dejes pluma negra alguna, prenda de la mentira
que profirió tu espíritu!
Deja mi soledad intacta.
Abandona el busto del dintel de mi puerta.
Aparta tu pico de mi corazón
y tu figura del dintel de mi puerta.
Y el Cuervo dijo: “Nunca más.”

Y el Cuervo nunca emprendió el vuelo.
Aún sigue posado, aún sigue posado
en el pálido busto de Palas,
en el dintel de la puerta de mi cuarto.
Y sus ojos tienen la apariencia
de los de un demonio que está soñando.
Y la luz de la lámpara que sobre él se derrama
tiende en el suelo su sombra. Y mi alma,
del fondo de esa sombra que flota sobre el suelo,
no podrá liberarse. ¡Nunca más!